THEATRE OF TRAGEDY 18.03.10

Cuando el mismo día te coinciden dos conciertos, te ingenias mil y una formas de decidir a cuál asistir. Esa era la incógnita de muchos metalheads amantes de los sonidos oscuros: ¿KATATONIA o THEATRE OF TRAGEDY? El factor clave de mi decisión fue cuando leí la inminente separación de los noruegos. Si de por sí TOT es un grupo difícil de ver, había que aprovechar la oportunidad de asistir a su última gira. A la vez, presentaban también su séptimo disco de estudio ‘Forever Is The Word’, editado el año pasado, y que, tal y como nos tienen acostumbrados, es una obra de arte.

Llegué a la sala justo con la última canción de los teloneros WHERE ANGELS FALL. El nombre del grupo es suficiente para saber qué ofrecen. Su propuesta es correcta pero es más de lo mismo: una copia de grupos como WITHIN TEMPTATION o EVANESCENCE, con chica de voz lírica y angelical al frente. No sé si sería por la poca asistencia en la sala o porque ya era el final de su actuación, pero la única persona entregada encima del escenario era la cantante Eirin. Un grupo correcto que, para entrar en ambiente, no lo hace nada mal.

Con unas 120 personas en la sala iniciaron su tot1actuación los noruegos THEATRE OF TRAGEDY. Las primeras notas de la canción que abre el nuevo disco, “Hide And Seek”, hicieron vibrar a toda la sala, expectante por cómo sería su concierto de despedida. Cuando salió en escena Raymond, acostumbrados a verlo con el pelo largo y ahora llevarlo cortado y con las facciones marcadas por la edad, hubo un momento de duda de si realmente era él o no, aunque quedaron disueltas en cuanto empezó sus guturales. También había curiosidad en oír cantar a Nell Sigland y si sabría hacernos olvidar a la que ha sido durante tantos años la voz e imagen de TOT, Liv Kristine.

Como buena gira de despedida que se precie, es esencial repasar lo que ha sido la carrera del grupo, y así hicieron. Canciones representativas de sus siete discos, excepto del ‘Assembly’, sonaron en una noche especial en que a más de uno se le cayó la lagrimilla por el buen concierto que ofrecieron y el hecho de que era el último, además de las sensaciones que transmiten sus canciones. Las más coreadas fueron “Bring Forth Ye Shadow”, “Lorelei”, “A Rose For The Dead”, “Storm”, “Cassandra” y la canción final “Der Tanz der Schatten”. Pese a sonar más de un sampleado, alguno de ellos con la voz de Liv Kristine, Nell supo estar más que a la altura a la hora de interpretar canciones de los primeros discos, respetando en todo momento el timbre de voz y la memoria de Liv, sonando incluso muy similar a ella.

Es una lástima que este grupo apenas se deje ver en directo y, ahora, se separe. Su directo es espectacular, y aunque apenas hablen entre canción y canción, su complicidad con el público y el feeling llegaron a toda la gente allí presente, que salió encantada de la actuación de los noruegos.

La asistencia también es otro factor negativo, pero es lo comentado anteriormente y lo que el mismo grupo dijo durante una pausa entre canciones, KATATONIA es una competencia muy fuerte y alguien tenía que salir perjudicado.

Realmente queda poco más por añadir, simplemente repetir que fue un gran concierto con un set-list casi perfecto aunque, bajo mi punto de vista, podrían haber tocado alguna más del ‘Aegis’ que sigue siendo, para la mayoría de los seguidores del grupo, su disco clave.  

Set-list

Hide And Seek

Bring Forth Ye Shadow

Lorelei

Frozen

Ashes and Dreams

A Rose For The Dead

Fragment

And When e Falleth

Hollow

Storm

Cassandra

A Hamlet For A Slothful Vassal

Fade

—

Machine

Der Tanz Der Schatten

Texto y fotografías por Xènia Senserrich